En nuestro día a día nuestro cuerpo entra en contacto con miles de “intrusos microscópicos”, que pueden provocar una alteración, daño o incluso llevarnos a una enfermedad. Por ello, nuestro organismo tiene desarrollado unos mecanismos de defensa que nos protege de todo el exterior. Partiendo de la definición de sistema inmunológico como “fortaleza natural del organismo contra bacterias, virus o infecciones”. En este caso, dicho sistema de nuestro cuerpo trata de combatir las sustancias que no reconoce, con la compleja red de células, tejidos y órganos especializados en reconocer sustancias extrañas activando los anticuerpos (sustancia segregada por los linfocitos de la sangre), generando una reacción inmunitaria ante estos “intrusos” llamados antígenos, pudiendo provenir de diferentes orígenes: virus, hongos, etc.
Gracias a una reacción bien organizada, nuestro cuerpo ataca y destruye los organismos infecciosos. Teniendo en cuenta que el sistema inmunitario es tu “muralla” contra el que los virus y bacterias se chocan cuando intentan invadir tu organismo. Debes tener en cuenta, que si esta “muralla” está llena de agujeros, desgastada o es fácil de escalar, estos pequeños intrusos pueden invadir tu cuerpo y conquistarlo a modo de enfermedad.
Teniendo en cuenta que cada individuo tiene un conjunto de genes diferente, existen personas que nacen de por sí con un fuerte sistema inmunológico y otras más débiles genéticamente que necesitan trabajar sus defensas mediante una nutrición más cuidada y saludable. Lo que es evidente y está más que demostrado a lo largo del tiempo, es que desde la antigüedad el consumo de cierto tipo de hierbas esenciales ha sido y sigue siendo la forma más natural y saludable tanto para aumentar, como para reforzar la inmunidad del organismo.
A continuación te traemos algunas de las hierbas esenciales más recomendables para que aprendas a fortalecer tus defensas de manera natural:
Escaramujo
Los frutos del escaramujo contienen diversos azúcares y ácidos orgánicos, así como pectina, sales minerales, carotenos (provitamina A), y vitaminas B1, B2, C, E y P (flavonoides). El contenido en vitamina C alcanza los 600 mg por 100 g, y puede llegar hasta los 800 mg, siendo uno de los vegetales más ricos en vitamina C. Las principales propiedades del escaramujo son las siguientes:
- Tonificante
- Antiescorbútico (falta de vitamina C)
- Diurético
- Depurativo (se recomienda en la retención de líquidos).
Recomendación: Decocción de 50-60g de frutos de escaramujo seco por 1l de agua.
Equinácea
Consta principalmente de su aceite esencial es el principal responsable del estímulo inmunitario, consta de más de 20 componentes entre los que destaca el geranil-isobutirato (61%); contiene también terpenos (pineno, tuyona y otros), y cis-1,8-pentadecadieno, sustancia que in vitro posee propiedades oncolíticas (destruye las células tumorales).
También se debe destacar su contenido en:
- Equinacósido: glucósido constituido por los azúcares glucosa y ramnosa, que tiene un marcado efecto antibiótico sobre diversos gérmenes.
- Poliacetilenos: de efecto bactericida y fungicida (destruyen las bacterias y hongos).
- Inhibe la Hialuronidasa: enzima producida por muchas bacterias, que desintegra el ácido hialurónico (componente fundamental del tejido conjuntivo) y permite así la difusión de los gérmenes patógenos. Al inhibir esta enzima, la equinácea detiene la difusión de los gérmenes por los tejidos.
Recomendación: Decocción de 30-50g por 1l de agua.
Genciana
Contiene diversos principios amargos, entre los que destacan la genciopicrina y la amarogencina. Como principales propiedades se pueden destacar:
- Tónico estomacal: Los principios amargos de la raíz de genciana, excitan la secreción de todas las glándulas digestivas, incluidas las salivares. Por ello abren el apetito y facilitan la digestión (acción eupéptica).
- Colerética y colagoga: Estimula la secreción de bilis por el hígado, y su vaciamiento al duodeno. Conviene en los casos de congestión hepática y de disquinesias biliares.
- Febrífuga: Esta acción no es muy marcada, pero resulta especialmente efectiva en caso de paludismo. Se ha comprobado que es capaz de destruir los protozoarios causantes del paludismo, que parasitan los glóbulos rojos de la sangre.
Recomendación: Decocción de 15-20g de raíz seca por 1l de agua.
Estos son tres de los muchos ejemplos de remedios naturales que existen para reforzar tu sistema inmunológico de forma saludable. Aunque podríamos destacar muchos otros: jengibre, tomillo, espirulina, entre otros productos de esta gran familia «healthy», productos de contrastada reputación saludable a lo largo de la historia en diferentes partes del mundo.
2 comentarios en «Hierbas para reforzar tu sistema inmunológico»
Una excelente variedad de productos saludables, así como un catálogo extenso de frutos secos, me gusta por su servicio y variedad de productos, así como su eficacia y rapidez, gracias.
¡Hola Ramón! gracias por su comentario. Trabajamos día a día en la mejora contínua de nuestros productos y en la satisfacción de nuestros clientes. =)